Un estudio publicado en la revista Geology de la Geological Society  of America realizado con la participación de investigadores de nuestro Instituto analiza en una sección transversal a la cuenca Neuquina la procedencia de los circones de las secuencias superiores del Grupo Neuquén. Sus resultados permiten arrojar luz sobre una antigua polémica sobre el desarrollo de la cuenca de antepaís neuquina.

 

Durante muchos años los estudios de las secuencias sismoestratigráficas del Grupo Neuquén de edad cretácica superior, indicaban una progradación desde el este basado en el análisis de las líneas sísmicas que cubrían el Engolfamiento Neuquino. Estas líneas se extendían mayoritariamente desde el borde de cuenca oriental hasta el dorso de Los Chihuidos. Sobre esta base se ponía en duda que el Grupo Neuquén correspondiese a una cuenca de antepaís dado el aporte exclusivo del área estable. Esta cuenca de antepaís se interpretaba como iniciándose en el Grupo Malargüe de edad maestrichtina–paleocena, donde era evidente un suministro de sedimentos del área cordillerana.

 

Los estudios previos de Tunik et al. (2010) publicados en la revista Tectonophysics habían permitido datar la edad máxima de la exhumación del arco magmático en la Cordillera Principal argentino-chilena como no más antigua que aproximadamente 100 Ma, que marcaría el inicio de la cuenca de antepaís con la depositación de la Formación Candeleros a lo largo del frente orogénico cordillerano desde el sur de Mendoza hasta Neuquén.

Los nuevos resultados muestran una abrumadora procedencia desde el sector oriental para las unidades post-Candeleros del Grupo Neuquén en concordancia con  los datos sísmicos. El trabajo interpreta que esta procedencia estaría controlada por el desarrollo del dorso periférico asociado a la carga tectónica de la faja plegada y corrida del Agrio durante el Cretácico Superior.

 

Una interesante conclusión de este trabajo es que un importante sector occidental de la cuenca de antepaís del Grupo Neuquén ha sido canibalizado durante la deformación cenozoica y en especial miocena, quedando retazos de sus depósitos neocretácicos como relictos en el sector del retropaís.

 

Para mayores detalles se remite a:

Di Giulio, A., Ronchi, A., Sanfilippo, A., Tiepolo, M., Pimentel, M. y Ramos, V.A. 2012. Detrital zircon provenance in the Neuquén basin (south-central Andes): Sedimentary response to the Cretaceous geodynamic evolution of a retroarc-foreland basin. Geology 40(6): 559-562.

Journal webpage:   http://geology.gsapubs.org/